Un 5 de julio de 1811, se firma el Acta de Independencia de Venezuela, la cual fue redactada por Juan Germán Roscio y Francisco Isnardi, entre los firmantes relevantes se encuentra el Precursor Francisco de Miranda, el Libertador Simón Bolívar no firmo, ya que no era diputado de ningunas de las provincias. El país se libera de la opresión española.
Este paso político del 5 de julio 1811, abre esa unión para la independencia de todos los países iberoamericanos. Estados Unidos, (como siempre), desconfiaba de esa unidad que se venía tejiendo en América Latina, pues ponía en peligro sus intereses colonialista sobre la región.
En el Congreso Anfictiónico de Panamá, (1826), los estadounidenses, con su grupo de presión empezaron a influir en las decisiones políticas y económicas, sabían del sueño de Simón Bolívar de una patria grande unida con igualdad y libertad.
El Libertador alertaba de las pretensiones de los imperialistas, y tres años después lo manifestó: “Los Estados Unidos parecen destinados por la Providencia a plagar la América Latina de miserias, en nombre de la libertad”.
No pudo estar más acertado el genio de América. Hoy en día las garras gringas acechan cualquier gobierno de cualquier país que intente trabajar por su pueblo.
Venezuela es un ejemplo. Pero no podrán porque no solo somos libres, también somos independientes. ¡Que viva nuestra independencia!
“En América Latina nos quieren imponer el modelo de democracia diseñado por los Estados Unidos, y al que no acepte entrar por ese carril, lo acusan de populista radical, terrorista y dictador”. Hugo Chávez Frías (Prensa Ipasme/ Gustavo Tovar Mijares/ Fotos Archivo).